Cómo y cuándo podar almendros

La poda de los almendros es una práctica esencial que favorece la salud del árbol, mejora la producción de frutos y mantiene la estructura adecuada. Se lleva a cabo generalmente en invierno o a principios de la primavera, antes de que el árbol salga de su periodo de dormancia. Durante este tiempo, es más fácil identificar las ramas que requieran ser eliminadas y minimizar el estrés para el árbol.

Es importante seleccionar y mantener entre tres y cuatro ramas principales con ángulos anchos como estructuras de soporte del árbol. Los jardineros eliminan ramas muertas, rotas y aquellas que se cruzan, ya que pueden interferir con el crecimiento saludable.

Además, gestionar el tamaño y forma del almendro mediante la poda regular puede facilitar el acceso durante la cosecha, incrementar la cantidad de luz a nivel del suelo para ayudar con el secado de los frutos y disminuir la presión de plagas y enfermedades.

La poda temprana de los ejemplares jóvenes establece la forma deseada y una estructura fuerte para los años venideros, mientras que en los árboles maduros, se centra más en el mantenimiento y la reducción de la densidad del follaje.

Es crucial no realizar cortes excesivos que pueden debilitar el almendro o exponerlo a infecciones. Cada corte debe considerarse cuidadosamente, apuntando a un equilibrio entre la salud del árbol y una producción óptima de almendras.

Fundamentos de la Poda de Almendros

La poda de almendros es esencial para mantener la salud y fomentar la productividad del árbol. Se requiere de técnica y conocimiento para realizarla adecuadamente.

Razones para Poda

• Salud del Árbol: La eliminación de las ramas dañadas, enfermas o muertas previene la propagación de enfermedades y reduce el peso excesivo en el árbol, que podría causar roturas en la estructura del mismo.
• Productividad: Mediante la poda, se regula la producción de frutos. Eliminar ramas excesivas permite que el árbol concentre sus recursos en producir almendras de mayor calidad.

Mejor Época para Poda

• Invierno: La época ideal es durante el reposo vegetativo del árbol, generalmente en invierno. Este periodo evita el estrés del árbol y minimiza el riesgo de infecciones.
• Primavera: Se puede realizar justo al inicio de la primavera, antes de la actividad intensa del árbol y siempre verificando que no haya riesgo de heladas que puedan dañar los cortes recientes.

Técnicas de Poda

La poda de almendros es esencial para su salud y productividad. Cada técnica tiene un propósito específico y se aplica en diferentes etapas de la vida del árbol.

Poda de Formación

La Poda de Formación se realiza en los primeros años de vida del almendro. Esta técnica tiene como objetivo establecer una estructura fuerte y equilibrada. Durante el primer año, se seleccionan de 3 a 4 ramas primarias y se eliminan las demás. Se busca formar una estructura en forma de “Y” para soportar la producción futura.

Poda de Producción

La Poda de Producción se enfoca en árboles maduros para maximizar su rendimiento. Consiste en eliminar ramas que compiten por luz y recursos, y se lleva a cabo para mantener la forma del árbol y mejorar la exposición solar del follaje. Es esencial evitar podas excesivas ya que esto podría reducir el rendimiento del cultivo.

Poda de Renovación

La Poda de Renovación se aplica para rejuvenecer árboles viejos o dañados. Implica cortes más radicales para estimular el crecimiento de nueva madera fructífera. Se realizan cortes de adelgazamiento que eliminan ramas completas desde su origen para abrir y airear la copa del árbol.

Cuidados Post-Poda

Luego de podar un almendro, es crucial atender a la planta para favorecer su recuperación y protegerla de agentes externos. Los pasos a seguir en el cuidado post-poda incluyen desde el tratamiento adecuado de las heridas hasta la protección contra posibles plagas que pueden atacar al árbol en un estado vulnerable.

Tratamiento de Heridas

• Sellado: Aplicar productos cicatrizantes o pasta de poda a las heridas más grandes para evitar enfermedades y plagas.
• Herramientas: Utilizar herramientas de corte limpias y desinfectadas para realizar podas.

Protección Contra Plagas

• Inspección: Examinar regularmente el árbol en busca de señales de infestación de plagas.
• Control Orgánico: Considerar el uso de métodos orgánicos, como la introducción de enemigos naturales de las plagas, si se detecta algún problema.

Asegurar una atención adecuada post-poda es vital para un crecimiento saludable y una cosecha exitosa en la siguiente temporada.